Los críticos siempre se equivocan

En términos simples, la crítica de arte es la discusión y evaluación de cualquier actividad artística que pertenezca a las distintas categorías. 

Para ser un crítico de arte debes de tener muchos conocimientos en la materia, historia del arte, contar con aptitudes literarias, capacidad de análisis y reflexión, así como habilidades de comunicación. 

Sin embargo, hoy todos son críticos, o al menos eso creen.

Hoy en día hay más críticos que mariposas monarcas, puesto que cualquiera puede (y está en todo su derecho) expresar su opinión acerca de una obra, de cualquier cosa en realidad.

Hoy todos son críticos puesto que su opinión es, aparentemente gratis, ya que las críticas en masa ponen en riesgo no solo al artista, sino a todo el mundo del arte. No es raro que, a pesar de que vivimos en un mundo conectado, aún se escondan artistas excepcionales por miedo a ser criticados. Las críticas no son gratis, ya que se cobran con la seguridad del artista.

Tal parece que abundan los expertos, juzgan el arte como si de armar un rompecabezas se tratase. Y el problema aquí es que juzgan el arte basándose en sus gustos, no en su conocimiento.

El problema de las criticas es que la mayoría de las veces vienen acompañadas de insultos, reclamos, falta de empatía, humildad inexistente y opiniones, y nunca en presentación de un plato lleno de pasión por el arte, construcción, parcialidad y justicia.

Los que critican a diestra y siniestra hacen un mal al artista. El artista que hace caso a las críticas hace un mal a su arte.

El galerista Ignacio de Lassaletta opina que “el crítico tiene poca influencia en el mercado, en círculos de arte sí que tiene”. 

El verdadero problema de la crítica no es la crítica en si, es la imposición de la misma. “El crítico al que no les gusta tu trabajo tiene razón. No le gusta tu trabajo. Nadie puede discutírselo. El crítico que dice que a nadie más le gustará tu trabajo se equivoca.” No es lo mismo decir "esto a mi no me gusto por esto y esto y esto, pero probablemente a ti te guste" que decir "esto a nadie le va a gustar".

Rotten Tomatoes, que literalmente se traduce como “Tomates podridos”, es una web que recopila críticas de películas realizadas por otros medios. Su nombre se debe a esa bonita tradición de tirar tomates a los actores de teatro que no terminaban de caer bien al espectador. Esta web funciona mostrando dos porcentajes de críticas: el primer porcentaje es obtenido por críticos certificados, es decir, gente que sabe sobre cine y el segundo porcentaje proviene de la audiencia, es decir, gente que no le interesa si una escena fue filmada en un primerísimo primer plano o en plano detalle. Si eres una persona culta en cuanto a cine se refiere, te basas en el primer porcentaje, si eres una persona que quiere disfrutar a su manera de una película, te basas en el segundo porcentaje, y si eres un escéptico no te fijas en ninguno y creas tu propio juicio después de ver una película.

¿Qué es peor, el que crítica o el que hace caso a la crítica?

Pese a las críticas, lo peor que un artista puede sufrir no es la demasía de críticas, sino la ausencia de ellas. Roberto Martínez argumenta en su libro Creativo que el enemigo del artista es la indiferencia. Es más conveniente recibir críticas "malas" porque eso significa que a la gente le importa tu propuesta. Nadie crítica algo que no creó ninguna conexión en él, tan solo lo ignora.

Es más necio el que hace caso a las críticas que el que las hace. Obedecer a las críticas es como robarle los pétalos a un girasol, como ver hacia abajo cuando el cielo te muestra un atardecer, como arrancar una Rafflesia arnoldii en un jardín de lotos. 

Si basas tu arte en los comentarios de los demás, mejor no hagas nada. Basar tu arte en las críticas es sucumbir a la desesperación.

Shyamalan es un director conocido por sus películas de suspense y giros inesperados. Después del éxito de películas como "The Sixth Sense" y "Unbreakable", sus películas posteriores fueron objeto de críticas mixtas o negativas. Aunque intentó tomar en cuenta las críticas y hacer cambios en su enfoque creativo, muchas de sus películas posteriores no lograron cautivar a la audiencia de la misma manera.

Camille Claudel fue una escultora francesa talentosa que trabajó en la misma época que Auguste Rodin. Aunque recibió elogios iniciales, sus obras y su relación personal con Rodin se volvieron objeto de críticas y controversia. A medida que su salud mental se deterioraba, su producción artística disminuyó y su carrera sufrió. Fue internada en un hospital psiquiátrico y pasó gran parte de su vida en relativo olvido.

Van Gogh nunca sucumbió a las críticas pese a que su arte fue muy mal visto en su época, esto debido a que en ese tiempo el arte solía ser bello. En una época en la que el arte era sinónimo de preciosidad, las obras de Vincent eran una bazofia a la sociedad. 

Maurizio Cattelan (el autor de la obra donde obtuve la portada del artículo anterior) es un artista italiano conocido por sus instalaciones y esculturas irreverentes y a menudo polémicas. Sus obras, que desafían las convenciones del arte y la moralidad, han generado críticas por su naturaleza provocadora y sus posibles interpretaciones. A pesar de las controversias, Cattelan ha mantenido su estilo distintivo y ha seguido creando obras que desafían las expectativas del público.

"Creamos y arte y después conocemos las reacciones, pero primero debe existir el arte. Si estamos enamorados de las reacciones e intentamos manipular los aplausos que recibimos, dejaremos de crear el arte del que somos capaces." -Seth Godin

El arte va mas allá de las críticas, puesto que el arte no pretende gustar, sino crear conexiones. No pretende ser bello, sino divino. 

"-Tal vez lo que estás diciendo es que...
tu regalo al mundo es pintar.
-si no es así, ¿de qué sirve un artista?"
-Vincent van Gogh