Desde edades tempranas de la sociedad se ha utilizado la figura de héroes para brindar inspiración hacia aquellos que la necesitaran. Individuos considerados dioses por todos los ordinarios. Que gracias a sus actos cometidos y a admiraciones en sus descendientes sus nombres hoy se encuentran impresos en los libros de historia. Porque cuando hablamos de héroes hablamos de Hércules, Aquiles, Prometeo, Quetzalcóatl, Perseo y Hermes. 

Aunque también hay otro tipo de héroes, conocidos por otras etiquetas como "genios, adelantados a su época, creadores o revolucionarios". Personas comunes que realizaron actos divinos, que hicieron descubrimientos importantes, que realizaron obras excepcionales y que marcaron la historia dejando sus aportaciones y nombre implícitos. Es gracias a sus acciones que hoy sabemos que Arquímedes fue conocido por sus descubrimientos en matemáticas, física, geometría y mecánica; que Aristóteles es uno de los creadores de la filosofía; que Hipócrates es conocido como "el padre de la medicina"; que Leónidas realizó batallas colosales junto a su contingente de soldados a pesar de estar en desventaja numérica.

Siempre han existido los héroes, referenciando sus nombres como sinónimo de inspiración, valentía y pasión. Sus actos han sido enseñados en los tiempos posteriores. De hecho, se dice que el viaje del héroe es la historia más antigua jamás contada.

Ventajas de tener héroes

"Una sociedad sin héroes es una sociedad sin esperanza. Porque esperamos lo mejor de cada persona, creamos los superhéroes. Los héroes están en la pantalla porque salen de la vida misma." -Mario López de Astea

Analizando el punto de vista psicológico y social, un héroe enmarca rasgos o características que todo hombre desea y admira, siendo visto como un ejemplo a seguir. Según estudios realizados por Scott Allison, estas son algunas de las funciones de los héroes sobre la sociedad:

• Nos dan esperanza
• Nos dan energía
• Nos desarrollan
• Nos curan
• Imparten sabiduría
• Ofrecen seguridad y protección
• Nos brindan emociones positivas
• Nos dan sentido y propósito
• Ofrecen conexión social y reducen la soledad
• Ayudan a las personas a lograr metas personales

Cuando éramos niños nuestros héroes primeros eran nuestros anteriores (padres, hermanos mayores, maestros y abuelitos), pues eran el único modelo a seguir que conocíamos y teníamos. Después, nuestra visión del mundo se fue expandiendo y conocimos a los héroes que promocionan las películas, los libros y la religión, por lo que fuimos admirando a aquellos que resonaban en nuestro corazón. Hasta que, dada cierta edad en nuestras vidas, perdemos la admiración que nos causaban nuestros héroes, nos damos cuenta de que eran un mito y que, no estamos en edad de admirar a aquello que es sinónimo de ficción. Pero el problema evidente no es que hayamos dejado de admirar a esos héroes, es que dejamos de buscar héroes nuevos a los que valga la pena admirar.

No es que los héroes sean un cuento simple para niños, los necesitamos, niños y adultos, creyentes y escépticos, hombres y mujeres, artistas y abogados, todos los necesitamos. Solo hay que elegir bien a nuestro héroes. 

Elige bien a tus héroes

Hay cosas en tu vida, muchas de hecho, de las que no fuiste participe en la elección, sino que se te fueron asignadas por el destino, tales como tus padres, tus hermanos, el lugar donde creciste, las escuelas a las que asististe y los profesores que tuviste. Si te fijas bien, ninguna de las anteriores fue decisión tuya, tu no tuviste nada que ver. Pero llegado el momento preciso, de pronto las desiciones que tomas, los amigos que eliges, la escuela a la que asistes, las relaciones que tienes y mantienes, el estilo que representas, los libros que lees y el arte que consumes se vuelven tu elección. De pronto eres dueño de tu vida, de tu profesión, de tus gustos (en gran parte) y de los héroes que has decidido admirar. Es llegado ese momento en el que eres dueño de ti.

"Fuimos niños sin padres...así que encontramos a nuestros progenitores en cera y en las calles y en la historia. Pudimos escoger los antecesores que inspirarían el mundo que construimos para nosotros mismos." -Jay Z

Elige bien a tus héroes, elige con cuidado. No cualquiera debe de tener el honor de vivir en tu bosque del conocimiento, mantén tu atención en aquellos que brinden calma a tu espíritu y caos a tu creatividad. Elige bien a los privilegiados cuyas palabras, obras y acciones pueden hacerte oír. 

¿Cómo elegir correctamente a tus héroes?

No existe un héroe divino que sea el modelo a seguir para todos, pero sí existe un héroe perfecto para cada individuo. La gente nunca elige a sus héroes basándose en su nivel de grandeza, sino en su relato, incluso desde niño, seleccionabas a tus héroes por sus valores, sus aptitudes, su visión del mundo, sus actos.

Puedes elegir a tus héroes por su apostura, por su buena reputación, su inteligencia, sus valores, su visión del mundo, las obras que ha realizado, por la influencia positiva que han tenido sobre ti, la forma en que han ayudado al prójimo y su relación con él.

Elige a tus héroes basándote en la persona que quieres ser y en el creador en el que te quieres convertir. Elige a aquellos que toquen fibras sensibles de tu espíritu, que le canten a tu alma y que expandan la visión de tu mente. 

"Te conviertes en aquello a lo que le prestas atención". -Epicteto

En su libro Roba como un artista, Austin Kleon nos invita a crear un árbol genealógico de referentes partiendo de alguien a quién admires los suficiente como para interesarte en él y sus obras, después es importante descubrir a tres personas que sean referentes para ese creador que elegiste en principio, y así sucesivamente hasta que tengas un árbol de creadores.

¿Qué sigue ahora?

Inspírate para poder crear y crea para poder inspirar.

La inspiración que no lleva a la acción conlleva a la decepción. No copies a tus héroes, sigue su ejemplo, el mejor elogio hacia ellos es saber que predicaste valores similares. No repitas su historia, crea una nueva, una propia. 

"El momento en que fracasamos al copiar a nuestros héroes es cuando descubrimos qué es lo que nos hace únicos. Así es como evolucionamos." -Austin Kleon

Mira a tus héroes, presta atención a sus relatos, ve las obras que realizaron, ahora mírate a ti, mira en el lago el reflejo de tus sentimientos, pasiones y acciones, ¿te pareces a ellos?

Piensa que, en el momento posterior de tu muerte podrás reunirte con aquellas almas que alguna vez llamaste héroes, podrás convivir con ellas, bailar con ellas, hacerles las preguntas que quieras y tomar una copa de vino con ellas. Solo que existe una condición única para que esto suceda y es la siguiente:

Para que puedas convivir con tus héroes; tus acciones, tus valores, tus obras, tus  sentimientos y pasiones deben de estar al nivel de lo que, ellos en su momento hicieron o sintieron, si es que fueron excepcionales, tu tuviste que haberlo sido de alguna manera. Porque no hay nada coherente en admirar a Gandhi y ser como Al Capone.

¿Qué hacer ahora?

1. Crea algo que valga la pena ser creado

2. Muéstralo a quienes esten dispuestos a oír tus relatos

3. Siéntete orgulloso

4. Enseña a otros a crear 

4. Repite

Probablemente los héroes que tanto admiras estén orgullosos de ti.