El arte de la vida
Este artículo está dedicado a mi papá, un hombre que se cansó de vivir. Quizás, si le hubiera recomendado tal libro o leído aquella frase o darle ese consejo, hubiera podido salvarlo.
"Un día despertarás y verás un bello día. Habrá sol, y todo será nuevo, cambiado, límpido. Aquello que primero te parecía imposible será simple, normal. ¿No me crees? Yo estoy seguro. Y muy pronto. Quizás mañana" -Fiódor Dostoyevski
Para quienes no saben vivir, o para los que se han cansado de ello. Para quienes han perdido la esperanza. Para todo aquel que roto está:
Parte primera: crítica
Es propio del humano pretextar que no existen similitudes entre el individuo y la máquina, común es que se regocije de pensar que es incluso mejor que ella, pues iza con orgullo la bandera con colores tan solo de humanos: el amor, el odio, el pensamiento, el vivir. Sin embargo, razones de sobra damos para mostrarnos iguales a ellas. ¿Qué cuáles son esas razones? Basta con una sola: cumplimos sin enfado las vanas ocupaciones, olvidando con ello el menester más importante: el de vivir. Si eso no es ser máquina, despójeme entonces de mi bandera de humano.
Somos tan necios los humanos que, incluso si existiese un manual para el buen vivir, no lo leeríamos por falta de tiempo o interés o humanidad. Prefiriendo por siempre el placer del cuerpo antes que el del alma, ¿a que nos lleva eso?:
De una llovizna nimia hacemos una tormenta peligrosa. Permitimos que nuestros pesares dicten nuestros actuares, interponiéndonos del entendimiento con el prójimo. Vivimos más en sueños que en la realidad. Nos creemos con derecho a todo y con obligación a nada. Del vivir nos olvidamos hasta que nuestros últimos días son llegados, teniendo ganas de la vida mientras nos encontramos en nuestros finales suspiros, siendo ya demasiado tarde, encontrándonos presos en arrepentimientos.
"Cuantos temían y exaltaban la impotencia, todos ellos temían la muerte porque sancionaban una vida en que no habían participado. No habían vivido lo suficiente porque no habían vivido nunca. Y la muerte era como un gesto que privaba para siempre de agua al viajero que había intentado en vano calmar la sed." -Albert Camus
Malaventurados aquellos que, aunque han estado mucho tiempo en el mundo, no han vivido mucho. Siendo tan corta la vida, son largos y grandes los pesares, como si disfrutáramos más las desdichas que las venturas, pero es más bien, que resulta más fácil creer que de nuestra vida no somos dueños, permaneciendo en el pozo de las desgracias porque nos creemos inmerecedores del paisaje fuera del pozo o porque no queremos escalar por miedo a caer.
"La única realidad es la que en nosotros tenemos, y si los hombres viven tan irrealmente es porque aceptan como realidad las imágenes exteriores y ahogan en sí la voz de su mundo interior. También se puede ser feliz así; pero cuando se llega a saber lo otro se hace ya imposible seguir el camino de la mayoría" -Hermann Hesse
Pobres de espíritu son aquellos que no saben apreciar el arte, que hullen de la lluvia, que en la oscuridad no buscan luz, que esperan con miedos cumplir determinadas edades creyendo que sus días de benevolencia han terminado, que prefieren los momentos bien filmados pero mal vividos, que pasan tanto tiempo construyendo el jarrón que se olvidan de las flores, que esperan tener ciertos bienes para considerarse acreedores de la felicidad, que prefieren la compañía de objetos sin alma antes que a cuerpos calientes. Esos pertenecen al mundo oscuro.
Vertiginosa es la vida del que busca la felicidad en cosas ajenas a él, son estos los que se enfadan de tomar siempre el mismo camino, pero les aseguro que nunca han visto las flores plantadas en ese destino. Cierto es que la felicidad la encontramos a la vuelta de la esquina, a centímetros de distancia, en donde uno menos se lo espera. Si tan solo prestáramos atención, nos daríamos cuenta.
Actores son los humanos, proyectando en su apariencia felicidad y bienestar, actuando de tal manera que, ni los más entrenados ojos se darían cuenta de su falsedad, por ello se resguardan sus respuestas verdaderas cuando alguien les pregunta «¿cómo estás?». su contento es carcomido por sus pecados, pero todo sea por no revelar su verdadera identidad al humano vecino, de tal manera que, reímos juntos pero lloramos solos.
"No es fácil ver a un hombre desdichado por no haberse detenido a pensar qué ocurre en el alma de otro. Pero quienes no siguen con atención los movimientos de su propia alma, fuerza es que sean desdichados." -Marco Aurelio
Hay quienes se encuentran encerrados en una jaula de oro, otros hallados están en una jaula sin cerradura, lo que es peor. Pues son los segundos quienes han cavado un nicho donde han sepultado ahí sus difuntos sueños y viejas pasiones. Al menos para los primeros hay esperanza, los segundos tendrán que aguardar por un socorro divino.
Somos los individuos tan ásperos que, incluso si tuviésemos 15 padres, y los 15 fuesen falleciendo uno por uno, seguiríamos siendo malos hijos con los restantes, lo mismo con los hermanos y con los amigos, mostrándonos incapaces de aprender de nuestros errores. El pretexto comprado por todos es que así fueron educados, como mostrándose ajenos a su propia historia, incapaces de escribir sus días, no son más que analfabetas, presos y necios, siendo merecedores de lo que los profetas llaman vulgo.
Esperamos con apuro que alguien arregle nuestro quebrado corazón, que nos guíe hacia el camino pavimentado, que nos diga como actuar y como pensar. Bañándonos en esperanzas frías, seguiremos esperando hasta congelarnos, la única solución es la presentada por Marco Aurelio: buscar en nosotros el guía interior.
"Si tú mismo no puedes encontrarte, tampoco encontrarás ningún espíritu que te guíe" -Hermann Hesse
Todos por igual cargamos con la cruz de nuestros pecados, con nuestras inseguridades y miedos en formas de cadenas, nuestra ignorancia es la corona de espinas.
Mi viejito se creía un no merecedor de cosas buenas, como si todo lo que comprase con el sudor de su esfuerzo no perteneciera a su propiedad, se refugió en aquella historia y de ahí no salió nunca. Navego por siempre sin parada en puerto. Pensaba más de lo que sus palabras podían expresar. El suicidio le hablaba en ocasiones repetidas con voz azucarada y gentil, escribiéndole correspondencia constante cual amada. Vestía con holgadas modestias para ocultar sus grandiosas proezas. No era dueño de sus actuares, siendo sus actos cometidos por mero impulso, convirtiéndose en un muerto viviente. La eterna compañía no le permitió conocerse a sí mismo. Sus pensamientos se volvieron ingobernables. Él más que nadie se gano el derecho a vivir, sin embargo, se negó a ese derecho e inventó por ello una enfermedad. Su corazón se volvió un planeta inhabitable, árido, vacío, frío. Tenía muertas las esperanzas y vivas las depresiones. Se enfrentaba a los sinsabores del día para en la noche encarar con su cama vacía, convirtiéndose en una eterna guerra, cansado para orquestar una revolución. De la virtud fue despojado y su sueño fue arrebatado. Tenia pesadillas despierto. Se creía más digno de nada que de grandeza. Esperaba un milagro, un rescate o la muerte, lo que llegará primero. Todo esto, fue su cruz, sus cadenas y su corona.
Parte segunda: esperanza
"Quienes descubren significados ruines en cosas hermosas están corrompidos sin ser elegantes, lo que es un defecto. Quienes encuentran significados bellos en cosas hermosas son espíritus cultivados. Para ellos hay esperanza." -Oscar Wilde
No existe noche alguna, por muy oscura que esta sea, que no vea la luz del día, no hay dolor tan grande que la esperanza no pueda aligerar, no se halla escéptico alguno que por milagro cometido no se convierta en creyente, pues los monstruos también se asustan y los insensibles también lloran.
"Incluso si no estás listo para el día, no puede ser siempre de noche" -Kanye West
Bienaventurados los días de aquellos que han comprendido, la vida es un juego, una broma, una fiesta, una reunión con los sentidos. Un fuego efímero con llamas a veces etéreas y a veces insulsas, pero que, aun así, continua calentando. Esos pertenecen al mundo luminoso.
"No vislumbraba felicidad sobrehumana, como tampoco eternidad alguna fuera de la curva de los días. La felicidad era humana, y la eternidad, cotidiana. Todo consistía en saber humillarse y ordenar el corazón al ritmo de los días, en vez de doblegar ese ritmo a la curva de nuestra esperanza." -Albert Camus
Sabias las criaturas que piensan que el final de los libros es la parte menos interesante, que lo sagrado se encuentra desde el comienzo, y lo divino se halla al medio. Y que cuando se acaba dicho libro, no queda más que agradecerle por las enseñanzas que nos presentó, siendo este libro, mostrado a las generaciones futuras por el nombre de noble, bueno, sensible, sabio, receptivo de belleza, inspirador, maestro.
"Aun en las condiciones más adversas puede afirmar el placer de toda la vida." -Epicuro
Santos son las víctimas de caos que siguen sonriendo, que han decidido escribir una historia en donde lo magnífico es invitado, los que han entendido que el hombre libre es aquel que no es esclavo de las circunstancias, aquel que ha decidido habitar en un mundo creado por él mismo. Ellos son entes no humanos y sí divinos.
"El pájaro rompe el cascarón. El huevo es el mundo. El que quiere nacer tiene que romper un mundo". -Hermann Hesse
Suntuosa la vida de quien es rico en sonrisas y abrazos, ese mismo ignora el ruido que hace que veas monstruos a los ángeles, pues ha decidido ver el amor y la felicidad como un mero ejercicio, no como una meta a alcanzar o como un premio a obtener o como un lugar al que se llega y se instala cómodamente hasta los últimos días.
“Enciende tu vida. Busca aquellos que encienden tus llamas.” -Sufí Rumi
La divinidad se asoma en el caos, como si esperase a que seas reducido a cenizas para que seas digno de su visita y te convierta, eventualmente, en una mariposa monarca o en un águila cóndor o en abeja, todo dependiendo de lo que la ley de la naturaleza tiene para ti.
Una sola flor puede convertirse en bosque. Una gota de agua puede romper montañas. Un rayo de luz enciende las llamas. La dicha se encuentra en donde menos se busca. Un ser vivo es un milagro divino. Un poco de fe basta para cambiar a un hombre, a una sociedad y a un mundo.
"Cuando sufras, oblígate a recordar un momento alegre. Una sola luciérnaga es el fin de la oscuridad". -Alejandro Jodorowsky
Existe salvación, hay esperanza, tan solo contempla los olores del café que perfuman la mañana recién levantada, encuentra más razones para vivir que para retirarse al descanso, encuentra deleite en una buena platica o un buen libro o una buena música, da más de lo que puedas recibir. No te preocupes por el futuro, preocúpate por el presente. No te preocupes, está presente.
Parte tercera: vida
"El error es creer que hay que escoger, que hay que hacer lo que uno quiere, que existen condiciones para la felicidad. Lo único que se cuenta, ¿sabes?, es la voluntad de felicidad, algo así como una conciencia enorme, siempre presente. Lo demás, mujeres, obras de arte o éxitos sociales, no son sino pretextos. Un cañamazo que espera nuestros bordados". -Albert Camus
No hace falta haber vivido 100 vidas para tener una buena vida, basta con leer 100 libros o hablar con 100 personas o escuchar 100 canciones o ver 100 películas o admirar 100 cuadros o tener 100 aventuras o 100 amores o 100 familiares. Una vida de días excepcionales, son muchas buenas vidas.
De nuestra vida somos los pintores, de nuestras desiciones protagonistas, de nuestras sonrisas los cantantes, bailarines en nuestros caminares, arquitectos de nuestros saberes y directores de nuestros momentos memorables.
El arte de la vida se basa en bailar en el mundo luminoso y abrazar el mundo oscuro, en entender que somos más viejos que ayer pero más jóvenes que mañana, en que vamos a igual paso los dormidos que los despiertos, en que la historia depende del escritor, que no se debe desear ni temer nada.
“Existen dos formas de ver la vida: una es creyendo que nada es un milagro, la otra es creyendo que todo es un milagro.” -Albert Einstein
Comienza ya a vivir y a dejar de ser máquina, que el tiempo no despierta a los dormidos. Observa y presta atención, que grandes hazañas se hallan en pequeñas cosas. Ve y explora el mundo, para que después regreses y se lo cuentes a los que no tienen ojos.
Finalmente, para quienes no saben vivir, o para los que se han cansado de ello. Para quienes han perdido la esperanza. Para todo aquel que roto está, comprométanse con está empresa, adopten como máximas lo ultimo que tengo por decir y no tardarán en merecer puestos de dioses:
Pon tus ojos en el cuadro de la vida. Muéstrate pobre cuando se trate de rencores. Deléitate con las excelentes compañías. Baila con tus desdichas. Evita el temor a determinadas edades. Censura la vergüenza y acude siempre a la prudencia. Ofrécete sumiso ante los dioses. Administra la renta de la vida, que es corta si se gasta con negligencia. No pongas tu futuro a completa merced del tiempo. Una vez construido el jarrón llénalo con las flores que oxigenen tu vida. Preséntate libre ante tus decisiones. No siembres odio y en cambio cultiva amor en tu árido corazón. Desnuda tu alma con quien se sienta cobijada. Pon tus placeres en reposo. Recibe sin orgullo y despréndete sin apego. Busca aquello que excite tu apetito de vivir. Recibe obediente la ley de la naturaleza y no reniegues de sus enmiendas. No censures a los dioses por tus desventuras. Dispón siempre de los recursos suministrados por la razón. No procures la amistad del lobo. Dirige tu propia historia, revela tu mito, conviértete en el héroe. Encuentra lo divino en lo cotidiano. Siembra tus rencores en el olvido. No expliques tu filosofía, vívela. Con la danza de los árboles deléitate. Contempla las nubes que dios pintó para ti. Admira el oleaje del caliente café que perfuma las mañanas. Adopta la sonrisa y llévala contigo en los días venideros. Cultiva tu bosque del conocimiento, enriquece tu pobreza de espíritu. Prefiere el placer del alma antes que el del cuerpo. No recurras al camino pavimentado, ahí no crecen las flores. Aprende de tus desventuras y promueve las aventuras, Divórciate del odio y cásate con el amor. No tengas miedo de perder nada, porque nada te pertenece. Copia las actitudes y cualidades excepcionales de tus humanos vecinos. Evita el cosquilleo de vulgos placeres. Vive según el modelo de sus palabras. No valores los bienes por su número ni por su peso. Dale gracias a la vida por permitirte arder un día más. Embriágate con el aroma de las tierras mojadas. Sube el volumen de la música de los colibríes. No te ahogues en el pasado, tómate el presente, llena el futuro. Reina sobre tus sueños, procura la lucidez despierto. La vida es un poema, aprende a leer. Y, finalmente: